Ene 28, 2019 | 12:00 PM
Barb Williams había estado esperando un riñón durante años. Sin que ella lo supiera, su donante llevaba casi tres décadas trabajando bajo el mismo techo.
Barb y su colega Donna VanNordstrand laboran en la Clínica Hutchinson en Kansas (Estados Unidos) pero en departamentos distintos, por lo que solo se conocían de vista. Ahora, ambas mujeres están a punto de formar un vínculo que durará toda la vida.
Barb sufre de enfermedad renal poliquística (PKD, por sus siglas en inglés), una enfermedad hereditaria que causa la formación de quistes en los riñones y el hígado.
La afección hizo que los riñones de Barb dejaran de funcionar hace varios años, llevándola a elegir entre permanecer en diálisis o comenzar a buscar un nuevo riñón.
Barb tuvo dos hijos que también padecen la enfermedad. Su plan era recibir un riñón de su único hijo que no fue afectado por la PKD, pero ahora él le donará a uno de sus hermanos.
En septiembre, Barb decidió hacer pública su búsqueda de donantes en el tablón de anuncios de su lugar de trabajo.
“Lo miré y pensé ‘wow, Barb necesita un riñón. Puedo donar un riñón'”, dijo Donna.
Así es como Donna comenzó el proceso para saber si era compatible con Barb y poder darle su tan ansiado regalo de vida. Donna no es la primera persona de su familia en donar un riñón. La mujer comentó que, años atrás, su hermano había hecho lo mismo por un amigo.
“Cuando lo hizo pensé ¡wow!, esto es algo bueno. Podría hacer eso algún día”, agregó Donna.
La cirugía fue programada para el 30 de enero en la Universidad de Colorado, en Aurora. Barb supo hace poco que su hermana también se sometería a una cirugía de trasplante cinco días antes que la de ella en el mismo hospital.
Con estas acciones, Barb y Donna desean transmitir la importancia de la donación de órganos.
“Me dará una vida mucho más larga y una vida más saludable”, apuntó Barb. “No tendré que ir a diálisis tres veces a la semana y recuperaré mi vida”.
Tanto Barb como Donna planean regresar a su trabajo en la clínica una vez que se hayan recuperado.
Fuente: KWCH
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