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Cuatro personas se beneficiaron de una nueva donación de órganos y tejidos en el Complejo Hospitalario de la provincia de Jaén, en España, trasplantándose dos riñones y dos córneas en pacientes que los requerían para salvar o mejorar su calidad de vida y estado de salud.

En lo que va del año, la provincia contabiliza un total de 16 actos altruistas y solidarios de esta índole, superando los 15 alcanzados en todo el 2016. Once de ellos tuvieron lugar en el citado complejo, mientras que dos lo hicieron en el Hospital San Agustín de Linares y San Juan de la Cruz de Úbeda, y uno en el Alto Guadalquivir de Andújar.

El donante, de 45 años de edad, falleció debido a un fallo neurológico en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Centro Hospitalario Neurotraumatológico.

“Hasta el momento, durante este año aún no hemos recibido ninguna negativa por parte de los familiares de los posibles donantes a ello, por lo que es muy de agradecer la decisión y actitud tan elogiosa de todos ellos, porque su decisión facilita que otros ciudadanos se salven o puedan mejorar de sus enfermedades”, informó la Coordinación Provincial de Trasplantes de Jaén.

Una de las dos donaciones de este 2017 en el Hospital de Linares fue la primera que se concretó en este centro, usando la técnica denominada en asistolia o a corazón parado, que los especialistas y la Organización Nacional de Trasplantes (ONT) de España consideran aumenta las posibilidades de realizar los trasplantes y brinda muchas ventajas y beneficios respecto a la anterior.

El Complejo Hospitalario de Jaén comenzó a utilizar esta modalidad quirúrgica desde el pasado mes de mayo, siendo ya 20 los centros de salud pública que la tienen implantada en la región andaluza. En 2016, ésta representó una de cada cuatro donaciones registradas en la comunidad autónoma y permitió 195 trasplantes de órganos (167 riñones, 26 hígados, un pulmón y un páncreas).

Con base en las donaciones registradas el año pasado, la tasa de donantes en Jaén es de 27,5 por millón de habitantes, en donde la mayoría de las familias aceptaron la donación de órganos de un familiar fallecido.

Fuente: La Vanguardia